Baile de Orgullo y Prejuicio:La Noche que me sentí Lizzy Bennet
Queridos Crazy Lovers, todavía estoy procesando lo que fue la experiencia más romántica y cinematográfica del año. Sí, asistí al Baile de Orgullo y Prejuicio en Pasadena y déjenme decirles… fue una fantasía hecha realidad. Si alguna vez soñaron con ser Lizzy Bennet por una noche, esto fue lo más cerca que se puede estar sin una máquina del tiempo.
🎉 ¿El motivo? Un aniversario que nos robó el corazón
El evento fue organizado por Focus Features, la productora y distribuidora detrás de la adaptación cinematográfica de Orgullo y Prejuicio dirigida por Joe Wright. Este 2025 se cumplen 20 años desde su estreno, y para celebrarlo como se merece, armaron un baile de época en honor a la inolvidable película protagonizada por Keira Knightley y Matthew Macfadyen.
Y como si no fuera suficiente emoción, apenas llegamos nos recibieron con una sorpresa muy especial: un video exclusivo de Joe Wright dándonos la bienvenida. Escuchar al director hablarnos directamente, recordando la experiencia de filmar esta joya del cine romántico, fue el primer golpe al corazón. Literal, ya estaba emocionada antes de cruzar el primer salón.
💌 El lugar: digno de una novela de Jane Austen
El evento se realizó en el imponente Langham Huntington Hotel, un hotel que ya por sí solo parece un set de filmación. Desde que puse un pie en el vestíbulo, supe que la noche iba a ser mágica. Los techos altos, las lámparas de araña, los salones dorados… todo transmitía esa vibra regency perfecta, como si estuviéramos en la mismísima Netherfield.
🎻 Una producción de película (literal)
Lo que más me sorprendió fue el nivel de producción. No solo se trataba de ir a bailar y brindar por Darcy. Había actores caracterizados como personajes de la película enseñando coreografías de época, artistas pintando retratos en vivo (¡como si estuviéramos posando para nuestra miniatura!), y estaciones de comida que no paraban de sacar delicias toda la noche.
Pero el momento más chills, goosebumps, heart explosion fue cuando apareció Jean-Yves Thibaudet, el mismísimo pianista francés que interpretó la banda sonora de Pride & Prejudice (2005). El salón quedó en completo silencio cuando tocó en vivo dos temas icónicos: “Dawn” y “Liz on Top of the World”. Si alguna vez lloré en una pista de baile, fue esa noche.
Y aquí va mi pequeña tragedia romántica: habían relanzado el vinilo oficial del soundtrack y yo estaba lista para comprarlo, PERO… se me había quedado la tarjeta en otro bolso y no aceptaban pagos electrónicos ni efectivo 💔. Muy triste, vi desde el fondo como Jean-Yves Thibaudet firmaba con calma cada vinilo a los invitados. Pero el destino no me iba a dejar tan mal parada: mientras estaba comiendo, de la nada él se acercó y se sentó justo cerca de mí. Aproveché el momento al máximo: me saqué una foto con él y logré que me firmara unos pósters. No fue el vinilo, pero fue igual de inolvidable.
💃 Y sí, bailamos hasta que se apagaron las velas
La música en vivo fue una constante durante toda la noche, alternando entre piezas de época y versiones modernas con arreglos clásicos. Todos, absolutamente todos, estábamos bailando. Había algo en el ambiente, una mezcla de romanticismo, nostalgia y celebración que nos hizo olvidarnos del celular (aunque obvio, sí me tomé mis fotos en las estaciones temáticas 👑📸).
🥂 Una noche que nos recordó por qué amamos tanto el cine romántico
Salí del Langham con los pies adoloridos y el corazón lleno. Este evento no solo celebró una película, celebró una forma de amar: con palabras agudas, miradas intensas y tensión romántica al máximo nivel. La adaptación de Joe Wright sigue siendo una joya atemporal, y estar ahí me hizo recordar por qué nos obsesionamos con cada plano, cada vals y cada “you have bewitched me body and soul”.
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